miércoles, 22 de marzo de 2017

¿Hablamos de series? The Girlfriend Experience, primera temporada

The Girlfriend Experience narra la historia de Christine, una estudiante de segundo año de Derecho que compagina su trabajo como pasante en una de las firmas más prestigiosas de la ciudad de Chicago con su ocupación como escort. Sin embargo, y si algo puede decirse sobre esta serie, es que las apariencias engañan y que cualquier idea preconcebida que se pudiera tener sobre la misma, o sobre esta sinopsis, salta por los aires en los primeros capítulos.
En primer lugar, considero que ésta no es una serie sobre sexo. Sí es cierto que el sexo forma una parte importante de ella y contiene numerosas escenas subidas de tono, muy difícil que no sucediera por otra parte, teniendo en cuenta la temática de la misma. Sin embargo, el sexo, tal y como he visto plasmado en algunas reseñas sobre esta serie, es una excusa para destapar un entramado de poderes, corrupciones e intrigas mucho más sucio que el propio sexo que lo desentraña.
La propia Christina es un misterio indescifrable que apenas se logra arañar a lo largo de la primera temporada. Su relación con su familia, sus compañeros en el despacho y con los hombres son pinceladas que nos acercan a este personaje que uno no sabe si compadecer o admirar por su honestidad y fidelidad y lealtad a sí misma. Christine se proteje a sí misma, no importa a quién se lleve por delante, ni el cómo (y menudo cómo, señores).
La serie aborda otras tramas tangeciales al trabajo como escort de Christine como las artimañas subyacentes en su lugar de trabajo y la implicación de ésta.
Por último, en lo que respecta al guión y trama de la serie, resulta muy llamativa la relación con Christine con algunos de los hombres con los que contacta debido a su trabajo como escort, una relación que en muchos casos trasciende la mera sexual pero, por supuesto que no tiene nada que ver con el amor sino que adquiere matices mucho más complejos como los celos, el cariño, o simplemente, el sentirse a gusto con una persona y las asombrosas implicaciones que estos sentimientos tendrán para nuestra protagonista.
La estructura de la serie también es uno de sus atractivos a mi modo de ver. La primera temporada (ya se ha confirmado la renovación por una segunda) consta de trece episodios de media hora de duración cada uno y he de decir, que esto resulta un acierto totalmente. Los episodios cuentan muchas cosas y nos muestran mucho de los personajes a pesar de su corta duración que precisamente los hace dinámicos y permite que en ningún momento se desconecte de la atmósfera sinuosa que los envuelve.
En resumen, tal y como también pude leer que coincidían numerosas críticas, The Girlfriend Experience tiene mucho más de "experience" que la parte "girlfriend" y por tanto, y por la impecabilidad con que se encuentra hecha, resulta altamente recomendable.


martes, 7 de marzo de 2017

Una lanza a favor de Reinas

Recientemente he finalizado con el visionado de la primera y única temporada de la serie Reinas, apuesta de Televisión Española para las noches de los martes. Mientras la estaba viendo sólo tuve acceso a un artículo publicado acerca de ésta que, para mi sorpresa, no la dejaba en muy buen lugar. Al terminar la misma, he revisado algunos artículos y críticas más y he tenido la impresión de que en general la serie ha sido mucho más criticada que alabada y mucho más odiada que seguida (a juzgar también por los pobres datos de audiencia cosechados). Sin embargo, en mi caso particular tengo que decir que, si bien fue un sentimiento cociéndose a fuego lento durante toda la emisión de la ficción, al haberle puesto punto final, puedo decir con conocimiento de causa que me gustaría romper una lanza en favor de esta serie.
Reinas se centra en la rivalidad entre las reinas María Estuardo e Isabel Tudor aunque también desempeña un papel bastante importante Felipe II de España. Intrigas, pasiones, guerras e intereses cruzados suponen el principal caldo de cultivo de esta producción de origen español.
En mi caso debo decir que he disfrutado enormemente con la serie. Los papeles del trío protagonista, especialmente Isabel Tudor me han mostrado personajes con mucho carácter y las ideas muy claras, capaces de velar y preocuparse por su pueblo mientras celebran fastuosos bailes. En este sentido, ha sido ampliamente criticado el papel de las dos reinas por ser presentadas como mujeres vulgares, poco inteligentes más preocupadas de frivolidades que del futuro de sus respectivos reinos. No puedo estar más en desacuerdo. Si que es cierto que la serie dedica tiempo a asuntos de índole más personal (matrimonios, relaciones extramatrimoniales, el mito de la virginidad de Isabel...) sin embargo, no nos engañemos, detrás de todas esas tramas siempre existen intereses políticos en los que las reinas demuestran desenvolverse como pez en el agua "a pesar" de su condición de mujeres. Asimismo la relación cada una a su manera con el sexo opuesto demuestra una gran inteligencia y un adelanto para lo que se esperaba de una mujer en aquella época.
Respecto a la falta de rigor histórico que se le achaca a la misma. En todo momento se nos vende como una ficción y no creo que haya sido calificada de documental en ninguna parte. Por tanto, si bien puedan producirse desviaciones del devenir histórico, si estas incurren en dotar a la producción de más acción no veo el problema. La serie cuenta con muchísimas referencias históricas que pueden despertar la curiosidad del espectador (en mi caso así ha sucedido) que tiene a su alcance numerosas fuentes para profundizar con el debido rigor histórico en la época. Sin embargo, si la serie fuese aburrida o mostrase a cualquiera de las dos reinas tocando un instrumento o hablando siete idiomas probablemente no excitase la mencionada curiosidad.
En resumen, esta serie no sustituye una clase de historia, pero nos acerca a una época de esplendor y decadencia, de intrigas y alianzas de manera intrigante.